España, siglo XXI. Un grupo de empresarios de
Castellón se muestra preocupadísimo porque los municipios habiliten áreas de autocaravanas.
Estos nobles hombres utilizan argumentos incontestables como: “puede venir un terrorista y aparcar allí”,
o: las autocaravanas aparcan “sin
seguridad, sin limpieza, tirando las aguas un día aquí y mañana a otro lado”. A continuación se ofrecen como única alternativa a este sindiós.
Señores de ASHOTUR: Gracias en
nombre de toda la ciudadanía. El riesgo terrorista que suponen este tipo de áreas no
puede ser tomado a la ligera, y espero que su notario levante acta de la
cantidad de mercenarios del ISIS que las frecuentan. Ciertamente, lo mejor para
evitar el riesgo de ser atacados es que los reciban ustedes en sus campings, lo
cual elimina el riesgo por completo.
En cuanto a la seguridad y la limpieza de estos
guetos terroristas, aciertan de nuevo. A pesar de estar integrados en las
localidades, ni la policía ni los servicios de limpieza están autorizados a
entrar en estas llamadas “áreas”, con lo cual, basta pasar por cualquiera de
ellas para comprobar cómo se amontona la basura y son atracadas las ancianas.
Eso por no hablar de tirar las aguas aquí y allá, porque aunque las áreas tengan
desagües habilitados a tal fin, de todos es sabido que el autocaravanista
prefiere verterlas en parques públicos o inmediaciones de colegios
mientras preparan sus atentados.
Nos solidarizamos con ustedes cuando dicen que
permitir que las autocaravanas aparquen en lugares habilitados “perjudica al sector del camping”. Y voy
más allá, alguien tendría que denunciar de una puñetera vez el perjuicio que
suponen las viviendas privadas para el sector hotelero. En una vivienda puede
pernoctar sin control cualquier pervertido, mientras que los hoteles (además de
pagar impuestos) controlan el DNI de sus clientes y lo comunican a la policía.
Pero bueno, me estoy desviando del tema.
No quiero acabar sin homenajear como se merece
esta gran frase suya que resume perfectamente la cuestión:
“Señores de los ayuntamientos, cuando vengan turistas, que
son bienvenidos a nuestra tierra, que vayan a los camping, que son los que
crean riqueza” (ASHOTUR)
¡Con dos cojones!
Es más, yo les obligaría a acudir a los
restaurantes (muchos llevan bocadillos), a los cines (algunos llevan DVD) y
a repostar en las gasolineras del pueblo. Es de cajón. Todo el mundo sabe que
la mejor manera de atraer clientes a un negocio es amenazarlos, tratarlos como
delincuentes y denunciar públicamente el riesgo para la seguridad y salud que
suponen. Poco se habla de la labor filantrópica de los campings al acoger desinteresadamente
a tales bestias.
En fin, todo es poco para evitar acabar como
Francia o Alemania, donde hay tantas áreas que los campings se arruinan, y con
ellos poblaciones enteras.
¡GRACIAS ASHOTUR!
Antonio Arroyo